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Usted no sube al cielo, usted vuelve a él.

 Muchas veces los dedos no escriben, veo mis manos colgando al costado de mi cuerpo, y las teclas moverse solas: el blog escribirse solo.
Cuando este blog empezó a escribirse a sí mismo, no era lo que es hoy.
No tenía tantos amigos, no tenía gente que lo leyera todos los días, no tenía una identidad.
Hoy quisiera hablarles de uno de los primeros amigos del For Bitching Only. Alguien a quien amé desde el primer momento y pretendo amar hasta el último.
Mi amigo tiene los ojos más claros y transparentes, más sinceros y hermosos vistos jamás. Mi amigo tiene los ojos de cristal.
Mi amigo irradia belleza y luz, mi amigo ríe como campanas, como el reflejo del sol en el agua, como una tarde brillante y feliz.
Ese es Edy.
Declaro amar obligatoria, sistemática y compulsivamente a Edy. No lo elijo, no lo pienso, simplemente, lo veo y lo amo. Lo adoro, lo abrazo, me siento bien cerca de él.
Y saben una cosa? No conozco su casa, ni a su familia, no hemos paseado perros juntos, no hemos vacacionado, no hemos cenado en un restaurante.
Hemos hecho algo mucho mejor.
Nos conocimos en un avión.
Y desde entonces hemos hablado, hemos bailado, me ha ayudado a escribir más de una vez.
Me seco las lágrimas y los mocos en la manga, porque hoy te vas.
Me enojo con no haberte invitado a bailar, a cenar, a vivir en mi propia casa.
Me enojo con que tengas todo el derecho del mundo a querer aterrizar en Nueva York.
Me enojo con que seas tan hermoso y tan adorablemente dulce y te vayas tan hijadeputamente lejos de mí, de mí, de mí.
Porque a las personas que quiero, las quiero para MI.
Entonces me arrepiento de no haberte conocido más, de no haberte aprovechado, de no haber inventado mil planes, mil momentos…
Mis dedos se detienen, dejo de escribir.
Las manos caen a los costados de mi cuerpo y veo como las letras en el teclado empiezan a hundirse solas, como si dedos invisibles estuvieran escribiendo, en vez de mí.
No soy yo, no soy yo, es el FBO.
Lo que nos dimos no se mide en tiempo ni salidas, no se mide en palabras, no se mide en cantidad de miradas.
Usted, señor de los ojos de cristal, usted ha salido de la cabina por niños atemorizados, usted ha visitado el galley de atrás cuando nadie lo hacia, usted ha bailado la cumbia del tc, usted ha sabido ganarse las cuatro tiras de nuestro corazón, usted cuando sube al cielo, no SUBE al cielo, usted VUELVE a él.
Usted pertenece allí.
Y ahí mismo es donde nos conocimos, donde nos vimos a través.
Y eso son mil quinientas cenas, eso son vacaciones en Disney, eso es ser amigos de la secundaria, eso es haber llegado al mejor lugar.
El corazón se me aprieta un poco cuando pienso en que te vayas, en no verte al abrir la puerta de la cabina, en no bailar un Futterwacken juntos, en dejar de festejar… pero al pensarte llegando a todos esos lugares a los que querés llegar, se me alargan los puentes, se me acerca Panamá, y entonces el Bitching Only, vuelve a querer saltar…
Como bien dijiste, compartimos el mismo cielo, y eso nunca va a dejar de pasar,
Cuando esté en mi sarcófago, peinando mi pelo hasta el piso, afilando mis garras de encaje y cerrando las cortinas al amanecer, recordaré tu sonrisa implacable y tus ojitos de cristal, y me prometeré, cada vez que te extrañe, imaginarme donde aterrizás.
Por cada ser turbio y escurridizo como yo, hay uno brillante como vos.
Por eso el mundo es hermoso como es.

Te despido sabiendo que nos vamos a volver a cruzar, te abrazo en tu decisión correcta, en tu destino abierto, en tu inmensa audacia, en tus ganas de volar.
Compartamos el cielo para siempre, amigo querido, tenés de tu lado todo lo que tenés que tener.

Propongo que festejemos juntos, una vez más.
Propongo que te despidamos con ganas de explotar.
Propongo un ritual furioso, propongo una noche de fuego, propongo una noche BIEN vulgar.
Ahí me tendrás bailando al son de tus despegues y de tus aterrizajes, al son de tu sonrisa franca, al son de tus ojitos de cristal.

4 comentarios en “Usted no sube al cielo, usted vuelve a él.

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